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viernes, 16 de diciembre de 2016

Quirós, Des-Atención Primaria.

Durante estas últimas semanas muchas han sido las quejas que he escuchado de lo que estaba pasando en Quirós con los médicos que llevan la Atención Primaria. Que las quirosanas y los quirosanos se dirijan a mi para que los escuche me presta mucho porque sólo pone de manifiesto mi labor como canal de comunicación que gracias a este medio puedo desempeñar. Poder ser útil a mi gente es un lujo, pero volvamos al tema que nos ocupa.
Quirós tiene dos médicos de familia. Quizás, de mano, parezcan muchos para la población que vive de forma permanente en el concejo, sin embargo si se analiza la pirámide de población y la dispersión geográfica es entendible. Efectivamente los médicos son deficitarios en cuanto a ratio de cartillas, pero no por ello dejan de ser ambos necesarios. Somos pocos sí, pero viejos y en aldeas remotas. Envejecimiento y dispersión de la población es la realidad de la Asturias rural. El caso es que por circunstancias una de las plazas quedó estas semanas vacante. Vaya por delante que existe el compromiso de cubrirla a corto plazo, compromiso que esperamos se cumpla. Desde el Ayuntamiento nos decían que no existen médicos suplentes (hay una oposición o un examen este fin de semana que hizo que los médicos que estaban en esa bolsa se dieran de baja para poder estudiar, vale, me parece razonable) pero mi pregunta es ¿cómo que no existen médicos suplentes? Me parece imposible y aquí viene la otra parte: no existen médicos suplentes, independientemente de los que se vayan a examinar este domingo, porque las condiciones laborales, los contratos que les ofrecen son tan precarias que muchos de nuestros médicos han optado por irse a otras comunidades. Sí, señores, nuestros jóvenes médicos se van fuera. Coño, ¿esto no era una leyenda urbana? (Areces dixit).
Entonces tenemos dos problemas. Uno, la situación de desatención de los usuarios reales y potenciales de la sanidad pública en Quirós y podría contar aquí alguna de las situaciones que se han dado durante estos días. No es el sitio y además, el derecho a la intimidad de las personas está por encima de muchas cosas (afortunadamente), pero alguna ha sido verdaderamente dramática. Y otro, un colectivo de trabajadores maltratados por su patrón, que no es otro que el SESPA, o sea, la Administración Pública. La política seguida por la Consejería de Sanidad es mala para todos los actores de esta obra, obra que unas veces tiene visos de comedia, porque ante algunas cosas vale más reirse, y otras muchas es una auténtica tragedia. Aquí lo que está en juego es la salud de la gente y esto no es moco de pavo. Ganando en salud, ganamos todos y hablamos además de un servicio que se lleva el 40% del presupuesto autonómico y de ese total un 16% se lo lleva la atención primaria.
Así nos encontramos a un concejo como Quirós con solo uno de los dos médicos que según el mapa de la Sanidad asturiana (por cierto, nosotros pertenecemos al área sanitaria IV) le corresponde y además ese médico resulta que lo cambian cada día. Esta era una de las quejas más recurrente. "Sólo hay un médico y encima cada día es uno diferente". Aquí viene otra parte de la reflexión. ¿Cómo es posible que hayamos perdido el concepto fantástico de médico de cabecera (ahora médico de familia)? Aquella persona de bata blanca que te conocía a ti y a tu familia, te preguntaba por cómo iban las cosas y si hacia falta te acompañaba a la salida del consultorio. Y es que esta sociedad en constante cambio nos lleva a dejar por el camino hasta las mejores cosas. Qué le pasa a una quirosana o a un quirosano que llega al consultorio y se encuentra cada día una cara diferente (bueno digamos cada semana, aunque también haya usuarios de diario) pues que no conoce a la persona que la atiende y para qué negarlo, hay cosas que no es fácil contar por muy médico que sea quien está enfrente tuyo, porque la relación médico paciente se basa en la confianza y esa se gana con el tiempo. ¿Qué tiene Quirós para que los médicos no quieran estar allí? Ah, no, que el tema también tiene que ver con lo que les ofrecen: falta de medios, contratos precarios, hoy dos días aquí, mañana tres allí, el fin de semana te damos de baja y te volvemos a contratar el lunes... Vamos las condiciones más favorables para trabajar a gusto y motivados. Un servicio deficitario para los usuarios y un trabajo en ocasiones miserable para el personal sanitario. O sea, la pescadilla que se muerde la cola. Volvemos a empezar.
La Sanidad Pública es uno de los pilares del Estado de Bienestar (otro la educación, sobre la que seguro también tendremos ocasión de reflexionar). La obligación de la Administración Pública es trabajar por ofrecer esa sanidad en condiciones de igualdad a todos los usuarios. No lo están haciendo. Nuestra obligación como usuarios defender nuestros derechos y no bajar la guardia.

1 comentario:

  1. Que lastima,con la cantidad de profesionales que tenemos desemplados!!

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